Aviso a los medios de comunicación para: Miércoles, 17 de junio, 11:00
Qué: Con motivo del Día Internacional de las Trabajadoras Domésticas, trabajadoras y activistas darán visibilidad a un caso crucial de robo de salario en San Francisco. Francisca Vásquez, trabajadora doméstica, pasó casi 20 años aislada en casa de su empleador, donde trabajaba las veinticuatro horas del día cocinando, limpiando y atendiendo a los ancianos padres de su empleador. Ganaba sólo 400 dólares -y más tarde 500- al mes. Aunque en aquella época el salario mínimo de San Francisco era de unos 10 dólares la hora, la paga de la Sra. Vásquez era de apenas 16 dólares al día. A pesar de las promesas de que se le daría la oportunidad de aprender a leer y escribir, y de ajustar su estatus migratorio, sus condiciones como asistente personal interna víctima de la trata, aquí en San Francisco, no hicieron más que empeorar.
Antecedentes:
El miedo y el aislamiento de la Sra. Vásquez se agravaron aún más por el hecho de que uno de sus empleadores era un líder religioso dentro de su comunidad, que pintó una imagen diferente al mundo exterior de lo que realmente estaba sucediendo en el hogar. Afortunadamente, en 2013, con la ayuda de API Legal Outreach y basándose en sus condiciones de trabajo más extremas, los Servicios de Ciudadanía e Inmigración expidieron a la Sra. Vásquez un visado T, al haber comprobado que era una superviviente de la trata.
Pero la batalla por la justicia y la dignidad no terminó ahí. A la Sra. Vásquez, representada por la Legal Aid Society - Employment Law Center, se le seguían debiendo salarios mínimos impagados por sus muchos años de duro trabajo. El 7 de mayo de 2015, el Comisionado Laboral emitió una sentencia por un monto de $138,386.85 a favor de la Sra. Vásquez. Aunque la ley de prescripción restringió su capacidad para recibir todo lo que se le debía, esta sentencia es una gran victoria para la Sra. Vásquez - y para el movimiento de trabajadoras domésticas. A continuación, las partes negociaron un acuerdo de conciliación que garantizaba el pronto pago de 100.000 dólares a la Sra. Vásquez y la no interposición de más recursos. La Sra. Vásquez sigue siendo miembro activo de Mujeres Unidas y Activas y está compartiendo su experiencia con trabajadoras domésticas de todo California mientras rehace su vida: "Cuando estaba allí, no podía hablar, tenía miedo de hablar. . . Ahora me siento mejor y empiezo a hablar con los demás. Y siento que soy libre".
Cuándo: A las 11:00, el miércoles 17 de junio de 2015
Dónde: Edificio de la Mujer, 3543 18th St, SF. (Segunda planta: sala Audre Lorde).
Quiénes: Mujeres Unidas y Activas (MUA), Legal Aid Society Employment Law Center (LAS-ELC).
- Francisca Vásquez, trabajadora doméstica y miembro de MUA
- Carole Vigne, abogada de LAS-ELC y Directora del Programa de Protección Salarial
- Juana Flores, codirectora de MUA y representante de la OIT en EE.UU.
- Hyun-mi Kim, API Legal Outreach (APILO) Defensora del cliente y asistente jurídica
Antecedentes adicionales:
Hay más de 200.000 trabajadores domésticos en California, y miles de casos de robo de salarios de trabajadores domésticos que no dan lugar a un acuerdo o a algún tipo de retribución. La gravedad del caso de la Sra. Vásquez saca a la luz la difícil situación de los trabajadores domésticos que, al vivir y trabajar en las sombras de las casas particulares, son especialmente vulnerables a los abusos.
En 2013, el gobernador Brown aprobó una legislación que otorga el pago de horas extras a los asistentes personales, la cual está vigente hasta el 1 de enero de 2017 y será reconsiderada por la Legislatura el próximo año. Dicha legislación reconocía a los asistentes personales como la Sra. Vásquez como personas merecedoras de los mismos derechos laborales que los demás trabajadores. El caso de la Sra. Vásquez subraya la importancia de mantener y reforzar la aplicación de estas protecciones.